Crisis económica.

¿Realmente hay crisis?

A robar el dinero público, saqueemos las arcas del estado y endeudemos a millones de generaciones. Les hemos dado dos guerras, que va, les hemos dado muchas guerras, y les hemos - como lo seguimos haciendo - metido miedo a la chusma. Mientras nosotros gobernamos y ponemos a presidentes que solo obedecen instrucciones monetarias y no humanas. Nosotros tenemos fábricas, tecnología, aviones, tanques, satélites, armas nucleares, exigimos más dinero para nosotros y para esa chusma que trabaja, se llevan las migajas que caen de nuestras mesas. Ahora, nos estamos quedando pobres, y queremos vuestro dinero, chusma.

Así parece decir entre sus reuniones familiares los Bush y su camarilla de pillos, porque ellos, no tienen ninguna crisis. Es más ya saquearon casi toda las arcas del estado gringo y la de otros gobiernos, y ahora que termina su mandado, como todo buen ladrón, se quiere llevar todo, todo, todo el tesoro.

Mientras el capital produce para unos pocos y por medio de instituciones como el FMI y el Banco Mundial, imponen sus normas sobre liberalizar la economía a países de Sur, millones de seres humanos buscan a diario cómo mejorar sus vidas dentro de este sistema que ellos, banqueros, controlan.

Los banqueros con las transnacionales se quieren adueñar del mundo, esta sería una frase al uso para apuntar quiénes están detrás de esta tan mencionada crisis. Ellos empobreciendo a millones mientras se enriquecen. Ellos se hacen cada vez más ricos mientras millones de personas que no tienen que comer, o qué llevarse a la boca, no hayan que hacer, como siempre, pero nadie ni los gobiernos de los países que se dicen desarrollados, se preocupa de estos.

Miserables banqueros y presidentes que llaman con carácter de urgencia para ayudar a los banqueros que se encuentran dicen, en crisis. Esos mismos presidentes que hoy se mueven para salvar a los Ricos, no salen en la ayuda de esos millones de personas. Es más, lo que hacen es, que esos presidentes y las transnacionales, influyen en sus decisiones, no vemos ese hilo invisible que une a presidentes y corporaciones imperiales, ellos son los que in-directamente influyen en la petición, que realmente hay que ayudar a los banqueros.

Y a los estados del Sur, a la inmensa mayoría, se les exige por medio del FMI o del BMI que bajen los salarios y que prohíban los sindicatos, los derechos de los trabajadores se convierte a la postre, moneda de cambia, hay que ser competitivos dicen. Mientras se engordan sus bolsillos. Nadie sale a ayudar a esos millones de trabajadores. Hay algo que no funciona en esas mentes más egoístas y obtusas, pusilánimes y lábiles del planeta.

Hay crisis nos dicen, y si, la hay. Crisis. Crisis. Crisis... lo repiten tanto que el miedo lentamente - y de manera silenciosa - se va apoderando del ciudadano de a pie y de aquellas personas que tienen algo de dinero en los bancos. Y los bancos pequeños al oír la crisis, se asustan, no hayan qué hacer, quienes tienen el dinero en los bancos van, corriendo a sacarlos porque no vaya a pasar que el banco me lo quite, como ya les ha pasado a muchos.

A otros bancos se les ofreció las hipotecas basura, y estos, al ver que se podía hacer dinero fácil no dudaron en abrir por todo el mundo pequeñas entidades bancarias y hacerse con el botín de las hipotecas. ¿quién fue el que insistió en las hipotecas basura? Quien haya sido se está frotando las manos, la hora de insuflar miedo llegó y de qué manera. Se desinflaron y se cerraron los bancos, pero quienes están detrás de esta crisis, saben - y lo sabían - que podían contar con el dinero público. Sólo los bancos con una mayor cuantía de millardos sabe responder a la crisis. Ellos se frotan las manos, mientras se ponen a la venta cientos de bancos por todo el mundo y, estos, tres cuatro cinco poderosos bancos los compran. Crisis, crisis, crisis, claro que hay crisis, eso es lo que nos quieren hacer creer.